Ahora, en 2014, su madre ha conseguido reabrir el caso con nuevas pruebas y, finalmente, se ha expedientado a dos excompañeras de la niña por acoso escolar.
Tanto la madre de Carla como sus abogados esperan conseguir “un castigo simbólico” para las dos niñas expedientadas. Quieren que realicen tareas socioeducativas y de reeducación sobre el tema.
Además, esperan que el colegio pague por su pasividad y falta de diligencia, pues el día que Carla se suicidó no avisaron a su madre cuando faltó al colegio y pasaron cuatro horas desde que salió de su casa hasta que murió, pudiendo haberla encontrado antes, tal y como afirma la propia madre.
Personalmente, sólo espero que al menos a raíz de esta sentencia se creen leyes al respecto para evitar más casos como éste... Así como que se eduque desde pequeños a los niñ@s para evitar que se den más este tipo de situaciones.
Finalmente, desde aquí darle el máximo apoyo y fuerzas a la madre de Carla y al resto de su familia.
Ojalá entre tod@s consigamos algún día que no se den más casos como el de Carla. Aunque, me temo, aún queda mucho por hacer.
Saludos,
Psicóloga Rocío N R (#CentrodePsicologíayFormaciónRNRAlgeciras)
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